Page 149 - San Luis Bertrán Eixarch
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meridional, comenzando por organizar ataques a
las flotas españolas que navegaban por las islas
del Mar de las Antillas y llegaban hasta el
puerto continental de Cartagena de Indias.
Desafortunado para Colombia, el excelente
obispo Fr. Jerónimo fue nombrado Arzobispo de
Lima y debió salir rumbo al Perú, el 13 de mayo
1541. Es justamente aquí donde se puede calibrar
lo providencial que fue la llegada de San Luis
Bertrán, toda vez que en Europa se había
configurado una coalición de teólogos
protestantes y clérigos católicos simpatizantes
de Lutero y Calvino, que discretamente estaban
unidos con algunos encomenderos, que desde
América secretamente les aportaban dinero.
Contra esta coalición secreta luchaban las
ordenes religiosas, con escasos recursos e
incomprendidos por amplios sectores de la
jerarquía eclesiástica, que no podían creer que la
traición de tan ―nobles caballeros‖ llegara hasta el
exceso de preferir la herejía protestante y asumir
las consecuencias de la excomunión, antes que
renunciar al control indefinido de territorios que
de acuerdo con el Derecho Real Español, no se
podían considerar baldíos.
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