Page 214 - San Luis Bertrán Eixarch

estaba pensando mandar a celebrar tres Misas

por las almas del purgatorio, mejor se comprara
un par de zapatos que estaba necesitando y que
las tres misas él se las celebraría sin necesidad de

estipendio. En cuanto al rosario, que no se lo
pidiera más al sacerdote porque ese rosario era
un instrumento de Dios en manos de ese clérigo

y que más bien él le obsequiaba otro también
traído de Indias.
La mujer quedó muy sorprendida porque

ella no había hablado con nadie de que deseaba
mandar a celebrar tres misas y quedó muy

contenta de tener un nuevo rosario y poder
comprar los zapatos que tanto necesitaba.
Donis Bautista, agricultor de Valencia,
comenzó a sufrir de fiebre muy alta y después de

tres meses de tratamiento los médicos lo
desahuciaron. Estando ya agonizando, vino a

visitarlo su cuñada y lo encontró delirando.
Entendiendo ella la gravedad del enfermo fue a
procurar el rosario que era de propiedad de
Catalina Espino, que lo había recibido por

segunda vez de manos del Santo, como ya se
mencionó, y trayéndolo lo colocó en el cuello del

enfermo y rezó un Ave María, quedando este

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