Page 67 - San Luis Bertrán Eixarch

en el siglo XVI la vieja sociedad de los deberes,

basada en la familia extensa y donde de manos
del clero se recibía la educación y la salud, que
bajo la orientación de un obispo era

suministrada por las distintas ordenes religiosas,
tal como lo había mandado Nuestro Señor
Jesucristo: Enseñar a todas las naciones y curar a los

enfermos.
Según ciertos teólogos renacentistas, los
padres y los hijos eran iguales ante Dios y ante

los demás hombres y supuestamente la Iglesia
Católica se había equivocado permitiendo el

surgimiento de una sociedad basada en la
institución familiar, que era fuente de toda
forma de distinción moral y desigualdad.
Pero el asunto protestante también tuvo su

propia revolución interna, llamada puritana, la
cual terminó llevando al patíbulo al Rey Carlos I

de Inglaterra. Según Lutero, si cualquier
zapatero remendón podía interpretar las
Sagradas Escrituras a partir de la luz que Dios le
enviaba, con mayor razón ese zapatero estaba en

capacidad de poder formular las leyes y ejercer
la política. Por consiguiente estaba sentando los

principios de la democracia moderna.

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