Page 125 - San Luis Bertrán Eixarch
P. 125

oportunidad para que San Luis revelara su gran

            capacidad para gestionar asuntos prácticos y
            resolver todo tipo de problemas.
                  Realmente era un alma polifacética, quienes

            lo observaban quedaban sorprendidos de su
            capacidad para realizar tantas cosas.
                  De este convento que sufría de pobreza

            extrema, continúa diciendo Fr. Antist:

                        Sin ser él pedigüeño, ni molestar a
                  nadie, ni hacer diligencias extraordinarias
                  para sacar dineros, ni procurando acariciar
                  mucho a la gente, antes bien, siendo algo seco,
                  Nuestro Señor, que es el universal repartidor
                  de los bienes,  movía los corazones de los fieles
                  para que le socorrieran bastantemente.

                  Durante las noches pasaba horas en oración
            y en compañía de Nuestra Señora del Santísimo

            Rosario, resolvía la grave penuria de su casa,
            hasta llegar a un punto en que el Convento pudo
            comenzar a dar limosnas a los pobres, que es la
            forma de medir el éxito o fracaso financiero de

            una obra religiosa.
                  Decía San Luis: “Si mucho damos por acá

            (señalando la portería), más nos devuelve Dios por
            allá (y señalaba la iglesia)‖. Fr. Antist, p. 2.


                                                                  111
   120   121   122   123   124   125   126   127   128   129   130